Redacción Deportes, may (EFE).- El presidente de la FIFA, el suizo Gianni Infantino, afirmó que ésta "no es una dictadura ahora", que "la crisis se ha acabado", tras los casos de corrupción que implican a exdirectivos pendientes de juicio, y que los relevos en sus órganos judiciales responden al final de los mandatos.
"No creo que debamos hacer una tragedia de esto, es un proceso democrático que debe ser aceptado por todo el mundo. Es una cuestión sencilla. Sus mandatos de cuatro años se han acabado. Las Confederaciones han propuesto miembros al Consejo y el Consejo ha propuesto nuevos miembros al Congreso. La reputación de FIFA está mejorando y si hay casos abiertos los seguirán investigando", dijo.
En una conferencia de prensa posterior al 67 Congreso que la FIFA celebró este jueves en Manama, Infantino aseguró sentirse "muy feliz" porque la organización ha sido "capaz de encontrar candidatos, que ya son miembros, y que son los mejores especialistas en el mundo".
"Sus nombres, en sí mismos, son una garantía de sus cualidades", sentenció Infantino, que insistió en que el organismo que preside desde febrero de 2016 ha establecido "los mecanismos de control necesarios para que no ocurran cosas raras en FIFA".
"No habrá corrupción. No puedo excluir que surjan otras cosas del pasado, pero lo que ocurrió en el pasado no va a pasar. La crisis se ha acabado", comentó antes de recordar que hace años cuando el parlamento suizo planteó un debate sobre la lucha contra la corrupción la postura de la FIFA no fue igual que la de UEFA, en la que él era secretario general y apoyó la iniciativa plenamente.
Preguntado sobre una posible investigación iniciada por la FIFA sobre el traspaso del francés Paul Pogba del Juventus al Manchester United, Gianni Infantino descartó la misma, aunque avanzó que en la reunión que el Consejo celebrará a finales de octubre en India el procedimiento de fichajes y el papel de los agentes serán parte del orden del día.
El presidente también desmintió que la FIFA pague cantidad alguna al exjugador argentino Diego Armando Maradona, presente estos día en Baréin, por acudir a actos de la organización, más allá del traslado al lugar del evento, igual que ocurre con los exfutbolistas del grupo de "leyendas".
"Ninguna de las leyendas recibe un sueldo. Ellos vienen porque confían en FIFA. En el pasado probablemente les pagarían, pero ellos ahora vienen y se divierten", respondió. EFE
FIFA no renovará mandato los dos presidentes del Comité Ético independiente
El alemán Hans-Joachim Eckert y el suizo Cornel Borbély, que aún investigan casos de presuntos sobornos y corrupción en el marco del escándalo "FIFAgate" destapado por EEUU, no continuarán al frente del Comité Ético independiente de la FIFA.
El Consejo de la FIFA, reunido el martes en Manama (Baréin), decidió no renovar el mandato del juez alemán, presidente de la cámara de resolución, y del fiscal suizo, responsable de la de investigación. En su lugar, el 67 Congreso de la Federación Internacional ratificará mañana el nombramiento de la colombiana María Claudia Rojas y del griego Vassilios Skouris.
La magistrada colombiana, expresidenta del Consejo de Estado de su país, presidirá la cámara de Investigación y Skouris, que fue presidente del Tribunal Europeo de Justicia en Luxemburgo durante 12 años hasta 2015, la de Resolución.
Los dos afectados han calificado en un comunicado conjunto al decisión de "políticamente motivada" y advirtieron que supone "de facto el fin de los esfuerzos de reforma" de la FIFA anunciados a raíz del escándalo para fomentar la transparencia, investigar los casos y recuperar la confianza en la entidad con sede en Zúrich.
El "FIFAgate" salpicó incluso al expresidente de la FIFA Joseph Blatter, al ex secretario general Jérôme Valckey, y al expresidente de la UEFA Michel Platini, y ha llevado a múltiples suspensiones de funcionarios del mundo del fútbol y de la FIFA.
"Esto llevará inevitablemente a una renovada pérdida de confianza y dañará más la ya de por sí perjudicada imagen de la FIFA", señalaron Eckert y Borbély, según recogen hoy los medios suizos.
"En consecuencia, la no renovación de los mandatos tendrá un impacto negativo en la FIFA a medio y largo plazo", recalcaron, y destacaron que sus sucesores tendrán que familiarizarse ahora con los casos y el proceso, lo que provocará "largos retrasos en investigaciones y procedimientos en marcha y complicará el procesamiento de violaciones del código ético".
"Parece que los responsables de la FIFA han dado concedido mayor peso a sus intereses propios y políticos que a los intereses de largo plazo de la FIFA", lamentaron Eckert y Borbély, por lo que Infantino y el consejo han "aceptado poner en riesgo la integridad y, por ende, el futuro" del fútbol, denunciaron además.
Los casos más emblemáticos de Eckert, que forma parte de la cámara de resolución del Comité Ético independiente desde 2012, incluyen la suspensión de Blatter y Platini, y también jugó un rol en la investigación contra Infantino el año pasado por haber aceptado ofertas para vuelos privados de Moscú y Catar.
Finalmente Infantino fue absuelto tras considerar la investigación que no había violado ninguna norma.
Borbély fue vicepresidente de la cámara de investigación entre 2013 y 2014, cuando fue nombrado presidente.
Dirigía la investigación contra el expresidente de la Federación Alemana de Fútbol (DFB) Wolfgang Niersbach y el exvicepresidente y leyenda futbolística alemana Franz Beckenbauer por la adjudicación del Mundial de 2006. EFE