
MELBOURNE, 15 ene (Reuters) - El miércoles se calentaron los ánimos en la clasificación del Abierto de Australia, cuando los jugadores tuvieron que hacer frente a otra jornada de aire lleno de humo y dos de los mejores tenistas fueron tachados de “egoístas” por no protestar por las condiciones.
La clasificación se vio interrumpida por segunda jornada consecutiva, primero por el humo de los incendios forestales y segundo por una tormenta de lluvia torrencial que despejó el aire pero puso fin a la jornada de partidos en el Melbourne Park.
Los organizadores del torneo han sido objeto de críticas por seguir adelante con la clasificación después de un retraso inicial el martes, ya que los jugadores se quejaron de dificultades respiratorias y uno de ellos se vio obligado a retirarse de un partido tras sufrir un ataque de tos.