(Reuters) - La vertiginosa carrera del italiano Mario Balotelli dio otro giro el jueves cuando el futbolista se despidió de sus compañeros en el AC Milan luego de un entrenamiento, ante una esperada transferencia al Liverpool de la Liga Premier inglesa.
En un breve comunicado en su página de internet (www.acmilan.com), el club italiano dijo: "Mario Balotelli ha dejado el centro deportivo de Milanello a las 13:30 después de despedirse de sus compañeros y del personal de prensa del club".
La posible transferencia de Balotelli sería un regreso a la Liga Premier, donde brilló, deleitó y decepcionó en igual medida durante su tiempo en el Manchester City desde el 2011 al 2013.
El delantero, de 24 años, es visto como un sucesor natural de otro brillante pero polémico jugador, el atacante uruguayo Luis Suárez, quien fue vendido al Barcelona en julio por 65 millones de libras (108 millones de dólares).
Suárez, de 27 años, fue el goleador de la Liga Premier en la temporada pasada con 31 tantos para el Liverpool. El jugador fue expulsado del Mundial de Brasil y suspendido tras morder al defensa italiano Giorgio Chiellini.
Balotelli se refirió a la transferencia cuando le dijo a periodistas que el jueves sería su último día en Italia.
"Hoy es mi último día en Milán y me voy al Liverpool", dijo el jugador, citado por el canal Sky Italia. Su agente Mino Raiola se encontraba en Inglaterra para completar el acuerdo por unos 20 millones de euros (27 millones de dólares), según medios.
Balotelli se sumó al Manchester City desde el Inter de Milán en agosto del 2010 y, tras brillar en la final de la Copa FA del 2011 contra el Stoke City, tuvo un papel destacado en la victoriosa campaña del 2011-12 cuando el City ganó su primer título doméstico desde 1968.
Tras una serie de problemas disciplinarios, como un enfrentamiento en una práctica con el entonces técnico Roberto Mancini, Balotelli firmó con el Milan en enero del 2013.
El jugador brilló para Italia en la Eurocopa 2012, torneo en el que marcó dos veces en el triunfo de semifinales contra Alemania y convirtió el gol de la victoria contra Inglaterra en su partido por la fase de grupos del Mundial.