GINEBRA (AP) -- Domenico Scala, auditor y responsable del cumplimiento de normas de la FIFA, anunció su renuncia el sábado en protesta contra la decisión del presidente Gianni Infantino de tomar control de los comités independientes que supervisan al organismo rector del fútbol que se ha visto plagado de escándalos.
La renuncia de Scala se da mientras surgen nuevas tensiones entre los dos directivos por el salario de Infantin
Se trata además de un primer reto importante para la integridad de la presidencia de Infantino desde que fue electo en febrero para reemplazar a Joseph Blatter.
Scala, quien ha supervisado el multimillonario presupuesto de la FIFA desde 2012, dijo que su renuncia es un "llamado de alerta" para la gente que trabaja en las reformas del organismo.
Las tensiones entre ambos directivos quedaron expuestas en el congreso anual de la FIFA el viernes en Ciudad de México. Las federaciones miembro aprobaron nuevos poderes para el consejo gobernante de Infantino para despedir a Scala y a líderes de la comisión de ética que investigan las acusaciones de corrupción.
Dichos funcionarios independientes que habían sido claves para la FIFA desde su designación, fueron el logro principal de las reformas anti corrupción encabezadas por Blatter en 2012.
"Estoy consternado por la decisión", dijo Scala en su renuncia, donde citó los movimientos del viernes, "debido a que mina el pilar central del buen gobierno de FIFA, y destruye un logro importante a las reformas".
FIFA señaló el sábado que Scala "malinterpretó" la decisión e hizo "acusaciones infundadas"
Sin embargo, la salida de un personaje clave en la búsqueda por poner fin a las irregularidades financieras en el fútbol mundial, será tomada en cuenta por las autoridades suizas y estadounidenses que tienen investigaciones criminales abiertas en contra de decenas de funcionarios del organismo, incluyendo a Blatter y varios ex vicepresidentes de FIFA.
Carta de FIFA aceptando la renuncia de Scala
La FIFA acepta, con efecto inmediato, la dimisión de Domenico Scala como Presidente de la Comisión de Auditoría y Conformidad.
La FIFA lamenta que el señor Scala haya malinterpretado la finalidad de la decisión adoptada por el Congreso de la FIFA. Se tomó la decisión de permitir al Consejo la designación de miembros, de manera provisional, para cubrir los puestos vacantes de las nuevas comisiones, con el fin de que puedan empezar a desempeñar sus funciones en el marco del actual proceso de reformas hasta el próximo
Congreso de la FIFA, en 2017. Esta medida permite además destituir con rapidez a los miembros que hayan incumplido sus obligaciones.
El Consejo respeta plenamente la independencia de las comisiones de Auditoría y Conformidad y Ética, y cualquier insinuación en sentido contrario resulta infundada.
El señor Scala ha realizado afirmaciones carentes de base y fundamento. La FIFA está centrada en las reformas y en el camino que debe seguir a partir de ahora, como demuestra la designación de una nueva Secretaria General de la FIFA.
Hasta que se nombre a un nuevo Presidente de la Comisión de Auditoría y Conformidad, la presidencia en funciones de dicho órgano recaerá sobre la actual Vicepresidenta, Sindi Mabaso Koyana.
La designación de todos los miembros de la Comisión de Auditoría y Conformidad y de los órganos judiciales de la FIFA está sujeta a estrictas comprobaciones de elegibilidad a cargo de la Comisión de Control de la FIFA, un organismo independiente. El Congreso elige a los miembros de la Comisión de Control.
Compondrán la primera Comisión de Control independiente Miguel Poiares Maduro, ex Abogado General del Tribunal de Justicia de las Comunidades Europeas, Mukul Mudgal, exjuez del Tribunal Supremo de la India, y Felipe Cantuarias Salaverry, expresidente del Sporting Cristal. Este mecanismo está diseñado para proteger a la organización frente a cualquier conflicto de intereses en la aprobación de cualquier designación para formar parte de las principales comisiones y organismos.
Durante su discurso del viernes, Infantino declaró finalizada la crisis de corrupción al interior del organismo.
Posteriormente, Infantino defendió su nueva autoridad para remover a gente clave que supervisa su labor.
"Aquellos que están comentando realmente no han entendido lo que estamos haciendo", dijo Infantino en la Ciudad de México, donde agregó que su consejo solo tendrá la autoridad por un año.
"Los juicios deben hacerse por la calidad de los miembros que están en dichas juntas y no haciendo especulaciones o colocando intenciones en la cabeza de las personas, que están lejos de la realidad".
Sin embargo, la táctica fue objeto de críticas del ex consejero anti corrupción de la FIFA, Mark Pieth, quien ayudó a Infantino, en ese entonces ejecutivo de la industria farmacéutica, a llegar a la FIFA hace cuatro años.
"(Infantino) básicamente está trabajando exactamente como (Michel) Platini y Blatter", dijo Pieth a The Associated Press en una entrevista telefónica. "Desesperadamente queremos ir ahora más allá".
Pieth insinuó que Infantino no estuvo de acuerdo sobre la oferta salarial de 2 millones de francos suizos (2,05 millones de dólares) que le presentó el panel de remuneración de la FIFA, que encabeza Scala.
"Es algo personal, está muy claro", dijo Pieth. "Quiere más de los 2 millones que le ofrece Domenico".
El publicar el salario del presidente fue la promesa central en la más reciente reforma, que se acordó en febrero, en la que Infantino y Scala fueron los protagonistas.
En marzo, se reveló que el salario base de Blatter para 2015 fue de 2.964.379 millones de francos suizos (3 millones de dólares).
Posteriormente se reveló que el salario del nuevo presidente sería una cifra menor, y que el nuevo secretario general sería el empleado con el sueldo más elevado.
La vacante se ocupó el viernes, cuando Infantino informó que la funcionaria de Naciones Unidas, la senegalesa Fatma Samoura, llegará a Zúrich el próximo mes. Será la primera mujer ajena a Europa y de raza negra en ocupar el cargo en los 112 años de historia de la FIFA.
La contratación de Samoura fue otra posible fuente del conflicto entre Infantino y Scala. Infantino actuó para hacer el sorpresivo anuncio sin un proceso de reclutamiento, mismo que Scala señaló que era necesario para la transparencia de FIFA.
Cuestionado el viernes sobre sus negociaciones salariales, Infantino dijo "en lo que a mí respecta, eso no se ha resuelto", y no es importante.
En su comunicado de renuncia, Scala atacó directamente la nueva autoridad para contratar y despedir empleados de Infantino.
"De ahora en adelante será posible que el consejo impida la investigación de ética en contra de miembros particulares en cualquier momento, al descartar a los miembros de la comisión responsable o mantenerlos bajo amenaza de un despido", recalcó.
"Por lo tanto, dichos organismos fueron privados de su independencia y están en riesgo de convertirse en agentes auxiliares de aquellos a los que deberían supervisar".
Pieth, profesor de criminología en la Universidad de Basilea en Suiza, dijo que el movimiento que le da autoridad para contratar o despedir personal, amenaza la credibilidad de las reformas que tienen como intención demostrar un cambio en la cultura de la FIFA ante las autoridades suizas y estadounidenses que investigan el escándalo de corrupción. News from The Associated Press